Canastilla para Sandra: vestido y un corazón

Hace poco una amiga mía tuvo una niña, Sandra, y me apetecía regalarle algo diferente y hecho a mano.

 Así que le hice este vestido y un corazón con su nombre bordado.

 Me encanta hacer canastillas para bebes¡ son tan dulces y especiales!

Nunca antes había tejido un vestido de bebé y este modelo siempre me ha gustado porque va todo unido, es decir, arriba el jersey de buena lana, suave y calentito y luego la faldita. Para mí son muy cómodos, sólo les pones unos leotardos y la niña ya esta vestida y va preciosa.

Si os fijáis la faldita es de tela de piqué con pequeños ositos azules  y arriba ¡ no es rosa! sino un suave color crema con detalles en el cuello y los puños también en azul. Es pequeñito, como de 3 a 6 meses.



Y aquí tenéis el corazón,  con el nombre de su niña bordado y una flor de crochet en rosa en la parte de arriba y de contraste abajo una tela de pique también en tonos azules ¡le faltó tiempo para colgarlo en la puerta!

 A Ana, que así se llama mi amiga, le gustó mucho y le llamo la atención que me acordase de que le encantan los ositos y el azul. Por eso siempre digo que las cosas hechas a mano son especiales, no sólo por el cariño con el que se hacen, sino porque tienen detalles que las hacen únicas y personalizadas. De hecho, todos los vestidos que le habían regalado eran rosas y aún no tenía nada con su nombre bordado.

 Y éste fue mi regalo para Sandra, una bebé preciosa y que podré disfrutar viéndola crecer.

¡Un beso cosinas!